Carta a un adicto.

Buenos Aires, 10 de marzo de 2009

Querido adicto:

Perfecta y maldita obsesión, que te deja morir sin vergüenza a numerosas personas. Hace sufrir a más de uno, con su típico y encantador aroma. Va acompañado de su amigo el alcohol, el que le ayuda a envenenar y a carcomer tu pobre cerebro. Estos nos convierten en humanos inocentes que caen a una fiel adicción.
¿Cómo hacer que dejes?, difícil, pero te aseguro que dejar te va a salvar la vida hermano.
Entraste culpa de la soledad y de la cruel sociedad. Pero ahora esta misma sociedad te quiere ayudar y debes dejar salvarte. Cuesta pero con gran sacrificio vas a vivir mejor.
La vida sin los vicios malignos es mucho mejor, te lo digo yo que ya salí de esa barbaridad y mira como estoy, mejor que nunca. Me libré, pude, gracias a la ayuda de mi gente. Y vos también vas a poder. Debes confiar en vos mismo y salir para adelante.

Conta conmigo para lo que necesites, que mi insuficiente ayuda te sirva.

Ojala dejes, un beso grande

Espero tu respuesta, Adiós.